Es día de dar explicaciones, Sus Señorías del Parlamento de Andalucía...

 Parafraseando a Don Miguel de Unamuno, decíamos ayer…

Que nuestra compañera Mariángeles Ramos, una de las más antiguas activistas de nuestra Federación, miembro del equipo de la Red Estatal de Mujeres por Andalucía y observadora delegada en el Parlamento Andaluz por nuestro comité de personas con experiencia propia, no tenía palabras para expresar su indignación por la manera en que los miembros de ese parlamento usan cualquier motivo para la confrontación más ruin, hasta que los árboles no les dejan ver el bosque y olvidan que están ahí para ponerse al servicio de la ciudadanía. Así que, como en una mala comedia de enredo, los unos se olvidaron de sus propias promesas para recordar a los otros que ellos habían tenido décadas para haber  hecho todo eso hace mucho tiempo… En definitiva, acabaron votando en contra su propio programa, con tal de fastidiar a los de enfrente.  Coherencia ante todo, ¿Verdad, Sus Señorías? Gestión, eficacia, compromiso, honestidad... Palabras que nada significan ya en el contexto político.

Nuestras compañeras y compañero lo vieron de primera mano: políticos de uno y otro signo nos usaban como escudo y proyectil al mismo tiempo, en lugar de mantener una actitud responsable y llegar a un consenso para dotarnos de las adecuadas infraestructuras. Nuestra Mariángeles, que asistía a esa sesión con la inocente confianza que ponemos en nuestros políticos, venía literalmente enferma a contarnos que solo se  aprobaron siete de las medidas propuestas, que para ese Parlamento no es urgente ni prioritario implementar un Plan de Prevención del Suicidio o una verdadera inversión en personal técnico y sanitario que mejore los servicios de salud mental tan tristemente despreciados.

                Nuestros observadores de Avance Sevilla en la sesión del 27 de octubre: Gerardo, María                    José, Inmaculada y Mariángeles, representante de la Red Estatal de Mujeres por Andalucía.

Se lo vamos a recordar a todos y cada uno de ustedes, alto y claro: no están ustedes en esos puestos privilegiados para ventilar sus rencillas personales ni para meterle el dedo en el ojo al contrario aprovechándonos como excusa. Ustedes están ahí, sean de las siglas que sean, porque personas como nosotras y nosotros les hemos votado. HEMOS DELEGADO EN USTEDES COMO GESTORES DE NUESTROS PROBLEMAS, no para que ustedes den titulares a la prensa más sensacionalista y practiquen el “y tú más “a nuestras expensas. A eso se dedican ustedes, y las personas que les hemos honrado con nuestra confianza, seamos votantes de quien sea, asistimos atónitas a tan penoso espectáculo.

Sabemos que hay presupuesto y que puede y debe ejecutarse hasta el último céntimo. No somos tontos, Sus Señorías, ni nos faltan personas altamente cualificadas para administrar esos fondos que ustedes, con sus batallitas partidistas, se olvidan de gestionar en beneficio de toda la sociedad andaluza. Hagan memoria, recuerden cuando se cerraron los manicomios hace ya unas tres décadas: las personas afectadas tuvieron que ser recogidas por sus familias, sin apoyo ni medios, o acabaron en la indigencia y cayendo en las adicciones o el suicidio. Desde entonces, Sus Señorías, el movimiento asociativo de Salud Mental Andalucía se las ha apañado para asistirnos, tratarnos, darnos un seguimiento exquisito a pacientes y familiares, promoviendo la terapia ocupacional, buscando fondos debajo de las piedras para mantener los programas y proyectos que han salvado tantas vidas. Esas asociaciones nos han acogido, nos han dado apoyo y propósitos, motivación para cuidarnos en cuerpo y mente, para ser útiles y productivos a pesar de nuestras discapacidades. Si no son capaces de administrar los fondos de que disponen específicamente para atendernos, tengan al menos la gallardía de cederlos a la Federación de SM Andalucía. Verán cómo desplegamos una increíble energía y aún más eficiencia, cómo damos cuenta de cada euro, cómo nos cunde ese dinero mucho más que a ustedes. Porque en cada pueblo y ciudad andaluza, desde las grandes urbes a los rincones más vacíos de nuestra geografía, hay una asociación luchando por nuestros intereses, con más entusiasmo y esfuerzo del que ustedes son capaces de imaginar. Llegamos donde no llegan los servicios públicos, damos un servicio integral de calidad, y Sus Señorías lo saben. 

Las personas con experiencia propia en Salud Mental no somos inútiles ni tontos. Vemos cómo anteponen proyectos e inversiones para causas totalmente alejadas de la ciudadanía. Les importan un comino las necesidades básicas y las prioridades de las personas. Dejen de regodearse en su autocomplacencia y pónganse a trabajar. No nos obliguen a ir a ese Parlamento y tomar las calles, porque somos muchos más de los que ustedes piensan y muchos sectores de la sociedad andaluza nos apoyan. SOMOS PERSONAS, y están ustedes demostrando que las personas les importan muy poquito.

Nosotros nos esforzamos cada día por ser útiles para nuestra sociedad. Inténtenlo también ustedes, déjense de chiquilladas, pónganse a ganarse su abultado salario y no nos utilicen para más pantomimas ridículas. La salud mental no puede esperar más, y ya hemos sido extraordinariamente pacientes. 

Desde SM Andalucía, les instamos con todo respeto pero con toda urgencia a que aprueben en pleno extraordinario y urgente las medidas que se les quedaron en el tintero. CONSIDERAMOS QUE ES LA ÚNICA SALIDA DIGNA A ESTA SITUACIÓN ABSURDA QUE USTEDES MISMOS HAN PROVOCADO. Y si no, nos ofrecemos a hacer ese trabajo que ustedes están rehuyendo. Pero no nos utilicen, no se burlen de nosotros. Ya no importa qué hicieron antes unos u otros, importa lo que hagan ustedes en este momento.

¡LES EXIGIMOS QUE ACTÚEN!

Y LES EXIGIMOS QUE ACTÚEN, AHORA, YA.